Anuário da Indústria de Implementos Rodoviários 2022

37 Tras pasar dos años de intensa inestabilidad económica, ocasionada en todo el mundo por la pandemia del coronavirus, con fuerte caída en los negocios en 2020 y su fuerte retomada en el 2021 gracias a un mejor control del covid-19 por la vacunación, la economía brasileña empieza a retornar su ritmo real. Sin embargo, las perspectivas son negativas. El panorama trazado por los analistas para 2022 es de mucha inestabilidad y estancación, en esta ocasión, una condición alimentada por la inflación alta y persistente que jala los intereses hacia arriba y los ingresos hacia abajo. La pandemia aún amenaza y desestabiliza las cadenas productivas en todo el mundo, pero ahora en un grado más controlado. En Brasil, el panorama empeora por las expectativas de riesgo político que trae el año electoral, se ve venir el aumento de la volatilidad de los activos financieros, lo que provoca desequilibrios constantes. “Elecciones en Brasil tienen el alto potencial de alimentar inestabilidades, pueden provocar la fuga de capital y llevar el cambio rápidamente a R$ 7.00, lo que trae nuevos choques inflacionarios, alta de intereses y comprime los ingresos. El riesgo más grande es que la política contamine la economía, ya delicada, y haga con que el PIB caiga por debajo de las expectativas, las cuales ya no son buenas”, evalúa la economista Tereza Fernandez, de la consultoría en análisis macroeconómica, MB Associados, responsable de la asesoría económica de Fenabrave – asociación que reúne a los concesionarios de vehículos. Economía deprimida - El PIB brasileño cayó el 4.1 %en 2020, subió el 4.5 % en 2021 – apenas lo suficiente para recuperar parte de las pérdidas – y ahora el promedio de las proyecciones apuntan para una estancación en el 2022, como es el caso de MB Associados. Pero analistas ya proyectan una retracción inminente de la economía. “El primer semestre de 2021 fue bueno, pero en el tercer y cuarto trimestres se vio que la recuperación perdió Un panorama de mucha ponderación Inflación alta, ingresos en baja y elecciones contaminan la economía At the same time, average monthly income - increasingly earned in the non-documented market – fell from R$ 2,757 at the end of 2020 to R$ 2,444 a year later, the lowest since records began to be kept by the official office of statistics (IBGE) in 2012. Renault says there are no longer the same incentives for growth as in 2020 and 2021. As an example, the Brazil Aid program for people earning up to R$ 400 a month, is expected to inject between R$ 50 billion and R$ 60 billion more than the former Family Grant would have in 2022, while the emergency aid of R$ 600 issued in the first year of the pandemic put more than R$ 50 billion a month into the economy.

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